lunes, 23 de noviembre de 2009

¿Dónde estás que no te veo?


Dicen que el que la busca la encuentra y que el que la sigue la consigue. Pero esas lecciones de perseverancia no siempre dan resultado. Uno puede pasarse tocando una puerta, una que por X motivos creen que es por la que deben de entrar, y no porque insistas e insistas la persona que está al otro lado te va a abrir. Bueno, finalmente lo puede hacer por cansancio, pero créanme que, si es así, lo hará de tan mala gana que van a desear que la puerta se hubiera mantenido cerrada.

No creo que buscar, buscar y buscar hasta encontrar lo que estás buscando sea una buena táctica. Piensa en todas las veces que tus llaves han desaparecido de tus bolsillos o mochila, cuando el par del zapato que combina perfecto con lo que te has puesto se fue caminando del clóset y se puso a jugar a las escondidas en el rincón más oscuro que hay debajo de tu cama.

¿Cuántas veces has rastreado tu casa buscando desesperado el control remoto del televisor –o cualquier cosa para tal caso- durante largos e infructuosos minutos solo para que, un rato después, llegue alguien y te señale que lo que buscabas desesperadamente estaba ahí, en tus narices, camuflado como un experto camaleón?

¿Ven? A veces es mejor no obsesionarse con encontrar las cosas, relajarse y alegrarse cuando estas se nos cruzan en el camino.

Ojo, no lean mal. De ninguna manera estoy diciendo que uno no debe luchar por lo que quiere hasta lograrlo. Solo estoy diciendo que, en cuanto a encontrar cosas perdidas se trata –y amores también, en un ratito les explico-, nuestra insistencia en vez de atraer las cosas, las puede repeler. Si buscas, buscas y buscas enfermizamente, probablemente llegues a pensar que todo lo que brilla es oro.

Aquí una historia para los incrédulos…

Después de una ruptura algo traumática, pensé que iba a ser imposible que volviera a encontrar a otra persona con la que pudiera verme en un futuro. Asustado -sí, ahora me doy cuenta que lo que me movía era el miedo a quedarme solo- quise llenar ese vacío, pero lo único que logré en esas noches de soltería fue hacer que cada vez sea más grande.

Salí con un par de personas mas ,que en el papel, eran todo lo que estaba buscando, cumplían con todos los requisitos que, sin darme cuenta, había enlistado en mi mente: independencia , temas interesantes de conversación, buen gusto y pasatiempos comunes,entre otras cosas más químicas que físicas.

Al principio, las reglas del juego eran claras: Ellas solo querían pasarla bien y yo también, porque ¿quién quiere empezar una relación cuando acaba de terminar una? Pero al final, porque no puedo evitar involucrar mis sentimientos, siempre terminaba queriendo más.

Darme de cocachos con la realidad, con la desilusión de que ese “algo más” no estaba en sus planes, al menos no conmigo, sí que me vino mal. Y como les dije, hizo que me sintiera más solo y, lo que es peor, que me convenciera de que simplemente no iba a encontrar a alguien que me quisiera de verdad, tal cual era. (Andaba algo decaído).

como siempre la ayuda de una buena amioga en este caso chio vega me ayudo a comprender que a todos nos llega la hora de amar que por mas que lo desearamos con todos nuestras fuerzas o nos escondamos de el , nos encuentra y nos atrapa.

A lo que voy es que eso no lo busqué, simplemente llegó y la necedad de mi búsqueda de manzanas verdes casi hace que deje pasar a esta jugosa manzana roja. Y lo más importante es que ella me ayudó a sacarme la venda de los ojos, a no cerrarme a las posibilidades que ya tenía preconcebidas. chio me calmó, me hizo ver que no era necesario que anduviera todo el tiempo con el radar en on y desterró mi idea de que no iba a poder sentir algo genuino por alguien de nuevo, sin poses ni caretas, y viceversa.

Después de que se fue, quedé más calmado, convencido de que me iba a encontrar con ese amor que tanto creía que necesitaba cuando tuviera que encontrármelo, porque simplemente ya era mi turno, no porque me había matado buscándolo. Y así sucedió.

Moraleja: No se empecinen en encontrar a LA persona. Cuando sea el momento, la verás sonriendo delante de ti.

Es hora de que se manifiesten. ¿Creo que tengo razón o no? En estos casos, ¿el que busca encuentra o creen que esa actitud de caza constante empeora la situación?

todos,incluso freddie mercury buscamos alguien a quien amar.

10 Somebody to Love.wma -

YOU FOUND ME, la pregunta es nos daremos cuenta?!!!!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario